Abrir un restaurante puede ser una gran idea siempre y cuando se sea consciente del esfuerzo que demanda este tipo de negocio. También es conveniente, antes de realizar cualquier inversión adecuando un local o comprando mobiliario, informarse y familiarizarse con los trámites, normativas y permisos que vas a necesitar para poner en marcha tu negocio. Por supuesto, las condiciones dependerán en gran medida de la Comunidad Autónoma en la que te encuentres. Por ello vamos a mostrarte aquí los permisos generales y más habituales que te van a pedir a la hora de abrir un restaurante.
Licencia de apertura de un restaurante.
Lograr poner en funcionamiento un negocio de hostelería implica reunir una serie de documentación que puede ser compleja. Toma nota:
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Licencia de Apertura: se trata de un documento que acredita al Ayuntamiento de tu localidad que el local cumple con los todos requisitos para poder abrir al público en condiciones óptimas de seguridad, riesgos y medio ambiente. Si el establecimiento en el que vas a instalar tu negocio ya tuvo en algún momento esta licencia será más sencillo obtenerla.
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Licencia de Actividad: es el permiso administrativo que nos da el Ayuntamiento para abrir nuestro negocio de restaurante. Para ello es necesario presentar una solicitud y especificar el tipo de negocio de hostelería que vamos a abrir (¿una pizzería, un bar de tapas, una sidrería…?) Tanto esta licencia como la anterior implican el pago de unas tasas municipales fijadas previamente.
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Proyecto técnico: es un documento que certifica que el local que se va a abrir cumple con los requisitos necesarios para desempeñar la actividad en cuestión. Esto incluye entre otros aspectos la seguridad contra incendios, la ventilación o la insonorización.
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Licencia de obra mayor o menor: en el caso de que el local necesite reformas, un arquitecto deberá elaborar la documentación técnica que tendrás que presentar al Ayuntamiento. Tras esto, un perito emitirá la licencia si el proyecto presentado cumple con la normativa
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Inscripción en el registro mercantil: solo en el caso de tratarse de una sociedad.
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Alta censal en la Agencia Tributaria: se debe presentar un modelo de formulario con datos del titular que sirve para comunicar que se comienza a ejercer la actividad y cuándo. Además hay que darse de alta en el IVA y concretar el régimen de tributación como autónomos en el IRPF.
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Licencia sanitaria: imprescindible en todo tipo de restaurantes al manipularse alimentos. Recuerda que los restaurantes y demás establecimientos de hostelería pertenecen al registro de establecimientos alimentarios para servicio y venta de productos alimenticios al consumidor final.
Como ves, para abrir un restaurante dentro de la legalidad y evitar sanciones y multas hay que cumplir con la normativa vigente y conseguir un buen número de permisos y licencias. El proceso puede resultar complicado para todo aquel que no haya estado antes familiarizado con los negocios de hostelería. Si es tu caso te convendría recurrir a una empresa solvente y especializada en obtener licencias de apertura como es el caso de Pleya en Asturias habituada ha ejercer de ventanilla única facilitándote todo el proceso.