Mucha gente con ideas de negocio en mente ve en los trámites que hay que realizar un impedimento para llevar a cabo su empresa. Si bien es cierto que el papeleo es inevitable, también es importante destacar que hay trámites que en algunos casos no son necesarios. La licencia de apertura es uno de esos documentos que tradicionalmente podían retrasar la puesta en funcionamiento de un negocio dependiendo de la celeridad de cada Ayuntamiento. Hoy en día, no obstante, no todos los negocios requieren de esa licencia de apertura. Por tanto, el proceso de legalización es mucho más rápido y sencillo. Te explicamos qué actividades no necesitan licencia de apertura y qué debes presentar en su lugar.

¿Qué negocios no necesitan licencia de apertura?

Las actividades que pueden llevarse a cabo en un negocio se dividen entre actividades inocuas y actividades calificadas. Las primeras son aquellas actividades que no generan molestias significativas ni son nocivas para la salud. Por ello, no necesitan licencia de apertura para poder comenzar su andadura. Aunque conviene consultar el listado de actividades inocuas de cada comunidad, te mostramos algunas de las más comunes por si tu idea de negocio está dentro de ellas. Si es así, enhorabuena ya que tu negocio puede ponerse en marcha sin licencia de apertura municipal.

• Floristerías, carnicerías, charcuterías, pescaderías, panaderías, pastelerías, fruterías, droguerías, vinotecas, peluquerías, lavanderías, tiendas minoristas de moda y complementos, zapaterías, jugueterías, barberías, supermercados, tiendas de muebles…
• Estudios fotográficos, agencias de viajes, inmobiliarias, academias, despachos de abogados, arquitectos o ingenieros, galerías de arte…

Por otro lado, las actividades profesionales, artísticas o artesanales que se realicen en una vivienda tampoco necesitan licencia de apertura, siempre y cuando no haya venta al público ni se produzcan molestias o riesgos para los vecinos.

Todas aquellas actividades que no sean inocuas y que sean susceptibles de ser nocivas, peligrosas o insalubres sí que siguen necesitando licencia de apertura (restaurantes, ocio nocturno, fábricas…).

¿Hay que presentar otra documentación?

Puede que no necesites una licencia de apertura para abrir tu negocio. Sin embargo, sí tendrás que presentar una declaración responsable donde afirmes cumplir todos los requisitos legales para llevar a cabo tu actividad.

El documento con la declaración responsable se presenta en el Ayuntamiento que corresponda y básicamente es una comunicación de apertura. En ese documento se manifiesta la intención de comenzar la actividad, se explica en qué consiste, de qué medios se dispone, incluso el local y toda la documentación con que se cuente.

De este modo, el Ayuntamiento no es quien tiene que dar la licencia de apertura, sino que queda avisado de que se ha iniciado una actividad en un local. Más adelante podrá hacer la comprobaciones necesarias para verificar que se cumple la normativa.

Gracias a este sistema se agiliza mucho la burocracia administrativa y se hacen más simples los procedimientos, algo de lo que las personas que emprenden un negocio se pueden beneficiar.